El universo tiembla de emoción cada vez que contempla la belleza de lo que es sentir amor entre gente buena. Gente que se admira mutuamente, gente que se respeta ante todo. Gente que protege y cuida su amor para que nunca marchite. Este tipo de gente son luchadores, porque llevan como amuleto una fe inquebrantable. Sucede el efecto dominó, pero al revés, se levanta uno, se levantan todos, arrastrados por una corriente imparable, aplastando cualquier obstáculo, cualquier freno y dificultad. Son fuertes porque en sus venas corre el virus del amor, están contagiados. El universo disfruta viendo tal alianza y que reconozcan el poder que tiene el amor, porque tiene capacidad para todo. Si en nuestro corazón habita la calma y no la tempestad, podemos lograr un mundo mejor. Podemos transformar guerras crueles en fiestas de paz. Aquí en la tierra no existe la escasez, hay para todos, existe la abundancia y cada persona buena merece formar parte de esa riqueza, de esa opulencia....
Ésta es la historia de una muchacha ilusionada. Se desvive por el Amor y la Vida, está en constante lucha de no perderse en la desesperación del tiempo y escribe poesía y sus historias!!!