Demostré que lucharía hasta el final por él, que dejaría mi ira hacía un lado, que pasarían mis tormentas mentales y que la luz conquistaría de nuevo mi corazón. Le lastimo, me lastimo. "¡Cuán felices fuimos!" En esos tiempos de lujuria y ataques de locura. Y qué triste se nos ha vuelto el mundo, nuestras vidas ahora por separado. Abandonamos la vía amorosa y continuamos por la vía crucis, la vía del sufrimiento. La vía pedregosa, una vía marañosa, impiedosa, espinosa. Ambos nos queremos, vivimos locamente enamorados, pero pensamos, no lo sabemos con certeza, que no compartimos un mismo destino y decidimos separarnos a pesar de los puros, candorosos y confiados sentimientos, que nos unen. Llevo meses sin saber de él y el dolor y la angustia me consumen por dentro. Me aflige el corazón, me atormenta mi alma y no paro de nombrarlo en bajito. No veo el momento en que su camino cruce de nuevo el mío, ...
Ésta es la historia de una muchacha ilusionada. Se desvive por el Amor y la Vida, está en constante lucha de no perderse en la desesperación del tiempo y escribe poesía y sus historias!!!