A todas esas madres coraje, a todas esas madres luchadoras, yo le brindo todo mi respeto y admiración, porque no es fácil inculcar valores ni la educación. Son nuestras protectoras, nuestras defensoras, desde nacimiento hasta el fin de sus días, ellas son nuestros ángeles de guarda, porque nunca abandonan la custodia, porque son nuestra escolta. Son nuestras consejeras, pretenden evitar nuestras decepciones, el dolor, gustan guiarnos por buen camino. No siempre obedecemos, nos ahorraríamos a veces sufrimientos si atendiéramos mejor a su asesoramiento, puesto que ellas siempre nos van a ganar en experiencia y pericia, poseen mucho más conocimiento y a veces toda ayuda por su parte se queda en el intento. Te prometen y regalan amor incondicional e infinito, amor hasta toda eternidad. Se entregan al cien por cien, lo dan todo por tu bienestar. Son excelentes ejemplos para seguir, idolatran a sus hijos, nos acompa ñan...
Ésta es la historia de una muchacha ilusionada. Se desvive por el Amor y la Vida, está en constante lucha de no perderse en la desesperación del tiempo y escribe poesía y sus historias!!!